3.2.14



Sara otero / 3 poemas


En los poemas de Sara Otero, la voz poética no duda en ponerse de cara al viento de las circunstancias, de su herencia, de los otros, con el convencimiento de que, en la intersección con su presente, habrán de trazarse los rasgos de una identidad perseguida con avidez por todos los rincones de su imaginario idiomático.




CUMPLEAÑOS

Yo,
            que he heredado la sal y las preguntas,
            que no cambiaría mi sexo por el sueño rojo de las amapolas,
            que tengo en la garganta
            la sed y las tormentas victoriosas
            acabo de cumplir treinta años.

Pocas cosas se esconden en este cuerpo
sobre las que el tiempo no haya vertido ya
su luz y su sombra;
los pies domesticados en la costumbre del impulso
y la intemperie,
este pecho que se bate y alegra por capricho
del azar
y conoce la calma
absorta del refugio.

Tengo a mi favor
la alegría de encontrarme en el intento
de conquistar la avidez de esta sangre
que empuja
tanto como ya ha perdido,
saber que existo
lo mismo que existen las huellas en la arena,
llena de un préstamo ingrávido
de aire y forma
que algún día
                        tendré que devolver.



PUMA

Veintevecesno necesito tocarte los bigotes,
de tambor nocturno.
Alquitrán. Puma de limo, voltereta asfixiada.

Me dueles. Veintevecesno voy a arrancarte los diptongos
del afilado eclipse de las orejas,
huracanearte hasta volverte el corazón de lagartija,
tu volumen de gota,
el lento galope sobre la hierba.

Ahora estás donde llaman casa
a un disparo de nieve en las pupilas
y tu descanso es la sombra de un cerezo;
donde no es primavera en abril
ni nunca germinarán tus uñas en el follaje muerto.

Mi dolor es un vaso de luz
donde dormitan salamandras.

Quiero hundir la nariz en tu espalda pequeña,
soplarte el vientre de arcilla
besar los erizos helados que te trepan

                                   por la garganta.




RAZA DE MUJERES

Las mujeres como yo andamos descalzas sobre libros de poemas,
devoramos puntillas,
somos
un manantial de alas rotas ante los nidos vacíos.

Las mujeres como yo nacemos sabiendo todos los recuerdos hermosos,
entusiasmadas como templos,
la traición nos degrada de color
del rojo al violeta y al revés. Lo olvidamos todo
pues la tristeza
es un gas ligero que nos sube por los pulmones
y estalla en los tímpanos
como un globo de helio.

Lo sé
porque mi vientre lechoso se inflama con la lluvia,
porque tengo el carácter impregnado de lágrimas fáciles
y silbo enloquecida el estribillo de los timbres
                                                           de las bicicletas….





sara otero (León,1982) ha obtenido diversos premios en certámenes poéticos: el último, el I Premio de Poesía María Eloísa García Lorca en 2013. Ha sido en dos ocasiones finalista del premio Adonáis. Es autora de los poemarios Abecedario de ausencias (Premio Letras Jóvenes de Castilla y León, 2002) y En el lugar de la lluvia, (I Premio Internacional de Poesía Manuela López). Ha sido incluida en la antología Poesía para vencejos editada por el Instituto Castellano y Leonés de la Lengua.

         
                                                                               ¶





                                                                                     Foto: factorialunamaluna

1 comentario:

  1. Desde luego es una de las poetas jóvenes leonesas con mayor proyección en los últimos tiempos.
    Esperemos poder seguir contemplando una carrera ascendente como hasta ahora.

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